Cómo hacer salchichas caseras

1Coloca el molino de carne dentro del congelador hasta que quede bien frío. Esto ayudará a evitar que la grasa se desintegre en lugar de molerse correctamente.

2Corta carne y grasa en cubos de 2 centímetros. En esta receta utilizamos cabeza de lomo de puerco y grasa de la espalda del puerco. Coloca la carne en el congelador durante 30 minutos para que se muela más fácilmente.

3Pasa la carne por el molino frío. El disco que utilizarás en el molino dependerá de la receta, pero los más comunes son los discos pequeños o medianos.

4Agrega los sazonadores que indica tu receta de salchicha. Éstos pueden ser especias, ajo, hierbas frescas, vino y, por supuesto, sal.

5Mezcla a carne con los sazonadores hasta integrar muy bien. Tapa con plástico adherente y refrigera durante por lo menos 1 hora o toda la noche. (A este punto la carne de la salchicha está lista para cocinarse si no deseas embutir en la tripa. Es recomendable cocinar una pequeña porción a fin de rectificar el sazón).

6Remoja la tripa en agua fría durante 20 minutos, luego enjuaga muy bien por dentro y por fuera bajo el chorro del agua.

7Fija el embudo para embutidos en el molino de carne. Al igual que el disco, el tamaño del embudo dependerá del tipo de salchicha que estés haciendo.

8Coloca la tripa en el cilindro del embudo.

9Empieza a pasar la carne de la salchicha por el embudo, deteniéndote justo antes de que ésta llegue a la boquilla de salida.

10Anuda el extremo de la tripa.

11Sigue pasando la carne de la salchicha por el embudo, sosteniendo la salchicha con tu otra mano.

12Una vez que hayas terminado de pasar la carne, anuda el otro extremo de la tripa.

13Rota la salchicha en intervalos regulares para crear salchichas individuales del tamaño deseado, rotando cada una en dirección opuesta a la anterior.

14Pincha cada salchicha con un picahielo, haciendo un pequeño agujero para que escape el vapor durante el proceso de cocción.

15Separa las salchichas cortando las torceduras que las une.

16Conserva en el refrigerador de 3 a 4 días o dentro del congelador por no más de 2 meses.